COALICIONES COMUNITARIAS DEL CERCADO DE LIMA

Barrios Altos es conocida en la actualidad no sólo por su tradición festiva sino también por el alto grado de inseguridad en que se vive. La tugurización urbana, el hacinamiento familiar, los pocos espacios de recreación, la delincuencia casi organizada y la cultura alcohólica están divorciando a esta área de todo el atractivo turístico limeño y, lo que es peor, plantea a los vecinos la sensación de estar viviendo en un "gueto" dentro de su propia ciudad.

Ante esto, la respuesta no se está haciendo esperar. El Grupo Impulsor ha entendido que la solución parte de engranar los esfuerzos de todos los sectores. La estrategia no sólo apunta a disminuir el elevado consumo de alcohol y tabaco sino también en contrarrestar el mal ejemplo que los padres dan a sus hijos, que los hace más propenso al empleo de drogas en sus relaciones sociales.

Las festividades de cualquier tipo son a menudo en Barrios Altos un motivo para que el expendio de licor se desborde a las calles sin discriminación de edad. Este hecho acompaña la acción de grupos de "carretilleros" que distribuyen estupefacientes en plena vía pública, conviertiendo las calles en lugares intransitables.

La futura Coalición de Barrios Altos tiene, pues, en sus manos una de las tareas más complicadas ante el problema de las drogas. Sin embargo, se espera que la adopción de las buenas prácticas y las experiencias exitosas de sus similares de Conde de la Vega y Mirones Bajo sirvan para ayudar a generar el cambio en la zona.